Las mamparas de ducha para el baño son elementos imprescindibles para garantizar una buena higiene y aportar seguridad. Pero además de priorizar estos dos aspectos, en su elección se han de tener en cuenta sus aspectos estéticos.
Desde Pepe Matega os ofrecemos algunas ideas para ganar luz con la elección de una buena mampara de baño.
Mamparas de vidrio
Si en el baño hay una ventana, aunque sea pequeña, hay que intentar que la luz llegue a todos los rincones del baño. Las mamparas de cristal son buenas aliadas y se pueden complementar con espejos, luces led y colores blancos o en su defecto claros para la superficie y las paredes.
¿Cómo elegir la mampara? Cerrada o abierta
La elección va a depender de las necesidades de cada hogar. Si quienes usan la ducha son personas mayores o con problemas de movilidad, la apuesta más recomendable son las mamparas abiertas, pues facilitan el acceso y salida de la ducha.
En cambio, las mamparas cerradas: con una, dos o tres paredes de cristal, y puertas correderas, ordenan mejor el espacio. A esto hay que sumar que en ambos casos hay que apostar por modelos que incluyan sistemas o tecnología que facilita la circulación del agua, para no acumular sal o suciedad en la superficie.
¿Cristal o acrílico?
Las mamparas de cristal, de vidrio, son las más utilizadas por sus características. El tamaño más habitual es el de 6 mm de grosor, aunque también las hay de 4 y 8 mm. Con estos modelos es frecuente que estén sometidos a procesos de templado, para dotar a las mampañaras de más resistencia y dificultad para la rotura.
Las mamparas acrílicas han perdido fuerza en los últimos años, pues a pesar de ser más económicas que las de cristal, en este aspecto las de vidrio han ido ganando fuerza y ya es posible encontrar modelos a precios muy competitivos.